¡Una Goma!

El Twitter sirve para aquellos que no tienen nada que decir, lo digan de inmediato.

El Blackberry ha llegado para hundir en la idiotez a las mentes ya idiotizadas.

Decir te amo es un punto sin retorno en una relación.

Internet mato a la revista porno.

El alfajor JORGITO es el HAVANNA de la clase obrera.

El día que faltás a la facultad explican el tema más importante y difícil.
El día que faltás al colegio pasa lo más divertido.

Del amigo de unagoma.blogspot.com quien de manera sincera y sin vueltas nos muestra de lo cotidiano la única realidad.

El precio de la libertad es la soledad

"¿Será posible cambiar este estado de humedad y cielo naranja, che?". Fue un pensamiento en voz alta. Asomaba mi cabeza de la ventana, y acto seguido insulté al mismo clima. Y al mismo mundo, para ser más general. Es que con todo eso ahí arriba y el malhumor que eso implicaba, no cabía otro pensamiento, al menos, esa noche, ahí, ese cielo. Lo que había sido una pregunta, se tornó una esperanza y una posibilidad al ver el cielo abrirse paso hacia un azul oscuro entre las nubes. Pero se volvía a cubrir. Y al mismo tiempo se cubría algo en mí, aunque faltaba bastante para llegar al fondo de esa cuestión. No podía seguir ahí, mirando como el cielo cambia de color y como se rompe esa ilusión de encontrar una sonrisa entre las formas de las nubes. Y la noche explica, en parte, ese desencuentro. Porque, claro está, mi visión reducida, un mareo constante y la oscuridad propia de ese momento nocturno, fueron groseros factores desencadenantes de ésta pérdida. Resulta que de día era igual; ese vacío que la presión de mis ojos no podía llenar. Sólo una vez, en madrugada, haciéndole frente a mi propio estado y a mis propias palabras, pude ver algo similar pero fué reinante desconcierto al ver que buscaba lo que ya no quería encontrar. Fué esa vez. Del desconcierto al vacío. Y después, nada. Porque nada hay después de ese vacío. Estaba igual de claro. Las inclemencias del tiempo ya no resultaban un problema, al menos no uno grave. "¿Será posible levantar la cabeza y ver el sol brillar, che?". Ésta vez fué un deseo. No ya un pensamiento, ni mucho menos un insulto. Lo que ésta vez hubo, fué una respuesta, casi implícita, de lo lejos, que se empecinó en contestar mis preguntas, que hasta el momento creí retóricas. `Si no fuera por este temblor acusante y constante, y esta capa de confusión y heridas que se me atravesó en el cuerpo, quizá pueda ver el sol, al menos, el cielo; quizás puedas comprender que es un nuevo día que el tiempo perdido, mal o bien, perdido está.´ ¿De donde salió tanto valor para asumir tan cruel verdad? Yo tendía a reírme, a creer que sólo fué un mal viaje. Pero se desnudaron verdades, lo que en otro momento fué ocultado por ésas mismas manos; justo esa voz cayó ese día, y si no fuera por escucharla, tal vez no lo pude haber creído. Pero admitiendo tantas verdades juntas, también hay espacio para el consuelo, el "yo creo": el cielo siempre es azul, resulta que no siempre se ve igual. Es suficiente con que en esa voz haya aparecido tu nombre, para peor, esa luz que no brilla en la oscuridad, pero si hace ruido en la oscuridad del alma, de la mente, rompe abismos hacia ambos lados. ¿Y uno como puede contra eso?. "¿Será posible que, si no vemos el color del cielo, el cielo nos vea acá sin color, creyendo que va a amanecer?" Nadie contestó. Tres besos y me fui.



Hoy escribe los breves tiempos raros, el gran granhugo, conocido desde los tiempos mas raros valga la redundancia.

Angustia, ira, confusión

Lo siguiente surgió en un estado de angustia, un poco de ira y mucha confusión. Es algo que salió de lo más profundo de mí ser. Lo voy a entrecomillar porque fue escrito hace un tiempo y lo tomo como una especie de autorreferencia. Reza el siguiente modo:

"¿Por qué hay mujeres (gran número) que valoran tan poco la amistad? ¿Por qué son tan absorbentes con la pareja?
Parecen no cansarse nunca de estar con el otro y, cada vez quieren más y más, como el niño que insiste a su padre por algo. ¿Qué no pueden ver que hay cosas más simples? Que se puede estar bien sin la necesidad constante de demandar al otro “te amo”, “sos mi mundo”, etc. etc. Que se puede estar en silencio o sin ganas de nada, y aun así, eso no significa que a uno le pase algo (malo) con la otra persona.

Que complicadas que son viejo...! Por qué no se conforman con NADA?! SIEMPRE, SIEMPRE, SIEMPRE… SIEEEMMMMMPREEEEEEE hay algo que las moleste. Le hacés algo para ellas, esta todo perfecto, PERO… le faltaba un poquito de sal. Le dedicas todo un fin de semana para ella, está todo bárbaro, hacés el amor, la mimas, y todo lo que le gusta (porque por ahí, si bien no tenés ganas o no te gusta algo, comprendés y lo hacés por amor a la otra persona, algo particular que le guste a ella) entonces, de repente decís: “Te amo” (realmente cuando lo decís del corazón, no todos los “te amo”, desgastados y poco sentidos, por demanda que uno se ve obligado ad infinitum! a expresar solo por capricho de ella) ¿y que pasa?: “No te sonó muy convincente, ¿te pasa algo?” NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO… la concha de... No me pasa nada!!! Le decís bien las cosas que no pasa nada, e insiste: “enserio, te noto raro ¿Qué te pasa?” Octava vez que le decís HONESTAMENTE, NADA!! Y te terminás sacando.

¿Por qué no pueden entender que con solo alguien que te acompañe, un poco de asado, una cerveza y una parrilla alcanza para todo un día para pasarlo totalmente tranquilo (y más barato y grato que ir a comer afuera o a un puto SPA!)?
Pero ellas pueden objetar, porque siempre tienen algo para decir, NUNCA les alcanza con lo que te dijeron al principio: que eso es cosa de varones, que ellas son distintas y también les gustan otras cosas. BIEN, te entiendo! Pero podés ser distinta y simple también. No necesariamente tenés que, “por ser diferente”, ser más compleja. Se te saca a comer PERO: o fue feo el lugar; o el lugar era lindo y la gente fea; o el lugar y la gente linda, pero la comida fea; o el lugar, la gente y la comida linda pero la atención fea (y se puede seguir así hasta el infinito [aunque el infinito queda chico])."

Que se yo, es algo que no se si tendra explicación, o que solo yo no entiendo. Al fin y al cabo, la culpa no eh del chancho…

En octubre los breves tiempos raros son de los que escriben al lado mio, en este caso, Kcolrehs.